Puerto Libertador. ¡Doloroso! Madre de la niña Emily, denuncia que no dejaron pasar la ambulancia y su pequeña falleció, "la ambulancia, a la hora que llegó al paro, la retuvieron. Si mi hija hubiese ido a esa cita, hoy contaría una historia diferente", afirma la madre de la menor.
Como es de conocimiento público, desde el pasado 05 de noviembre, inició el Paro de "Las comunidades Zenúes pertenecientes al resguardo Indígena Centorgua, y Juntas Comunales de la zona, dicho paro, que según comunicado oficial, tiene como objetivo “propiciar espacios de dialogo y poder debatir las diferentes afectaciones que vienen recibiendo las comunidades por la operación de las empresas que operan en la región”, ha llevado al bloqueo de vías en Uré y Puerto Libertador.
Incluso, el jueves 07 de noviembre, habitantes de Puerto se unieron y levantaron el bloqueo en las vías, afirmando que ya no aguantan un paro más, y que se están viendo perjudicados por el cierre de las vías. Es preciso mencionar que, esto igualmente conllevo a una reunión donde al parecer varios de los que levantaron el bloqueo, decidieron apoyar la iniciativa, eso sí, propusieron levantar el bloqueo o ampliar los tiempo de circulación vehicular.
Sobre la circulación vehicular se conoció que no hay paso para vehículos que transportan colaboradores de empresas de la zona, lo cual afecta no solo a las empresas sino también el retorno y cambio de turnos de los colaboradores. Hoy viernes 08 de noviembre, avanza reunión entre manifestantes y autoridades locales y representantes departamentales y empresariales, por medio de la cual se busca llegar a una pronta solución a esta problemática que afecta a decenas de familia y colaboradores de empresas mineras y de transporte.
En medio del Paro y el bloqueo de vías, relata Laura, la madre de la menor fallecida, que, la niña una pacientica con cuidados paliativos, debía asistir a una cita médica en Montería, debido a que la menor usaba oxígeno, era necesario su traslado en ambulancia, efectivamente la ambulancia, según la madre de la menor, llegó hasta la Y de San José de Uré, donde fue retenida.
"Una señora le dijo al conductor que no podía pasar porque no traía paciente; el conductor le explico muy amablemente (a la señora), que el venía a recoger una paciente, para llevar a una cita médica. La señora simplemente le contestó que le dijera al paciente que aplazara la cita. Si mi hija hubiera ido a esa cita, hoy contaría una historia diferente", afirma Laura. Pese a que el conductor habría comentado la necesidad de acceder al paso, le habrían negado el mismo, razón por la que la menor no pudo acudir a la cita médica, desencadenando su lamentable deceso.
El hecho genera consternación y repudio, si bien la protesta pacífica es un derecho, la misma, no puede vulnerar los derechos de los demás y menos de un menor de edad. Los Indígenas y demás, que adelantan el paro, habían dicho que había corredor humanitario, sin embargo, muchas personas denunciaron que no se les permitía el paso a citas y exámenes médicos, e incluso, algunos afirmaron que, para pasar, debían pagar.
La madre de la menor hoy llora la partida de su hija que poco o nada tenía que ver con el paro, su denuncia y reclamo ante la irreparable pérdida es también para hacer un llamado al respeto por los Derechos Humanos, pero que ese respeto sea integral, no circunstancial. Ella no busca beneficio o resarcimiento económico, ella busca que los manifestantes en este o cualquier otro paro, tengan presente que en la región cada familia vive su propia historia y cada una lucha por salir adelante, por eso el Derecho debe ser colectivo y no un Derecho para unos cuantos.