En el marco del proceso de paz los diferentes actores del proceso, quienes creen, quienes no creen, quienes están en contra, en fin, todos hablamos del proceso de paz, o sea un acuerdo general para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera.
Hablar de este proceso es mencionar que los diálogos oficialmente iniciaron el 18 de octubre de 2012 en Oslo Noruega y posteriormente se adelantan en la Habana Cuba, en medio de altibajos, pero también con garantes del proceso.
pero hablar de paz es hablar de la verdad, equidad, reparación a las víctimas, justicia social, igualdad, respeto y una voluntad política de paz, pues como dijera el presidente de la CGT, Julio Roberto Gómez “la paz no se firma, se construye entre todos”.
Sería preciso preguntarnos entonces si todos estamos dispuestos a construir esa paz que por más de 50 años ha cobrado la vida de niños, jóvenes y adultos, que ha deteriorado todo cuanto ha encontrado, que ha dejado desolación, dolor y rechazo en un país tan bello como Colombia.
En estos momentos, necesitamos preguntarnos si en verdad queremos la paz, para que eso nos lleve a construirla, no desde una firma, que otorgue un nobel al presidente y otro Iván Márquez, la verdad es que necesitamos una paz donde todos aportemos, todos cumplamos con nuestro deber y de esa manera también reclamar nuestros derechos, necesitamos que el gobierno no venda el país, que la corrupción no siga acabando en conjunto con la guarra nuestros sueños, necesitamos todos decir y construir la paz, pero también necesitamos todos, cumplir nuestros deberes, reclamar nuestro derechos, decir no más corrupción, pero también eso implica no hacer parte de ella.
Necesitamos la paz, pero una construida entre todos.
¿Yo quiero construir paz y tú?