“En el decreto siempre estuvo un objetivo de investigación, innovación y producción científica para que el país se convierta en el epicentro de la investigación de los derivados del cannabis. Aquí hay una historia emergente económica por el mercado global que se está generando. Colombia no ha tenido muchas historias agroindustriales de éxito y aquí vemos una oportunidad económica de desarrollo del país que se necesita de manera imperiosa”, estas son las palabras del ministro de salud, Alejandro Gaviria, en defensa del otorgamiento de licencias para la producción de marihuana.
Este es un tema de debate y más cuando varios senadores lanzaron duros cuestionamientos al ministro de Salud por el otorgamiento de las licencias para la producción legal de marihuana medicinal. Los pronunciamientos tuvieron lugar en un debate de control político convocado por el senador liberal Juan Manuel Galán donde se citó al ministro de salud, Alejandro Gaviria.
Las críticas más fuertes fueron las de las senadoras Claudia López, de la Alianza Verde, y Viviane Morales, del Partido Liberal. López aseguró que el ministerio expidió dos licencias para la producción de cannabis, las cuales fueron conferidas de manera gratuita, cuando la ley que habilitó el uso de la marihuana para fines medicinales establecía un cobro. "el Estado no le puede otorgar mediante licencia a un privado a cargo de nada", aseguró la senadora.
Por su parte Viviane Morales dijo que el Ministerio no le ha dado un manejo transparente al tema de la marihuana medicinal, mientras que los senadores Doris Vega, Alexander López Maya y Paloma Valencia aseguraron que la marihuana se puede convertir en un negocio millonario y un foco de corrupción en el sistema de salud; razón por la cual se advierte que debe prestarse especial atención al tema.
“Los avances que ha tenido Colombia en este tema institucionales que involucran al Gobierno y al Congreso son los mayores en la región, y somos un ejemplo para todos. Chile, México y Jamaica están mirando con admiración lo que hemos avanzado”, fue una estrategia que resultó siendo, en retrospectiva, al menos provechosa, productiva y buena para el país, de acuerdo al estudio que hizo el Ministerio de Salud.