“Para que un año lectivo se dé por perdido, tiene que registrarse una calamidad, que la misma Institución Educativa establezca que no puede cumplir con la mayoría de las jornadas laborales, no porque un docente no esté asignado, de modo que esperamos que esto no se produzca en ningún caso, seguimos con el proceso de subsanar las plazas docentes que faltan”, afirmó el secretario de Educación Departamental, William Tapia. Según el funcionario, aunque algunas instituciones educativas en los municipios de Pueblo Nuevo, Tierralta y Valencia entre otros, donde faltan docentes se avanzará en el proceso de nombramiento y no será dado por perdido el año escolar. En los lugares donde se presenta esta situación, el funcionario hace un llamado a los rectores de cada Institución para disponer planes de recuperación de clases, una vez sean dispuestos los docentes, y así se establezca el horario compensatorio, para nivelar el pénsum académico, y de esta manera, los estudiantes recuperen las clases perdidas. Pese a estas declaraciones no podemos estar seguros que los alumnos en verdad aprendan en dos o tres meses lo que debían aprender en nueve meses. No podemos hablar de calidad educativa cuando los alumnos no cuentan con las garantías para tener una educación de calidad que les permita ser excelentes profesionales.